Investigadores del Centro Singular de Investigación Marina y del IEO desarrollan un sistema de gestión para la alimentación temprana de la merluza europea

Miércoles, 7 Junio, 2017

La diversificación de las especies marinas ha surgido como una prioridad en la agenda acuícola de muchos países, debido a su gran potencial industrial y como alternativa a la sobreexplotación pesquera. Esta diversificación conlleva nuevos retos en especies candidatas, entre ellas la merluza europea (Merluccius merluccius), cuyos retos decisivos son la disminución de la mortalidad masiva observada cerca de los 25 días tras eclosión, la optimización de la alimentación temprana y la gestión larvaria.

Con el objetivo de avanzar en el estudio de la alimentación temprana de la merluza europea, investigadores del Instituto Oceanográfico de Vigo (Manuel Nande y Montse Pérez) y del Centro Singular de Investigación Marina de la Universidad de Vigo (Pablo Presa y Damián Costas) llevaron a cabo un proyecto de colaboración en el que diseñaron y testaron un sistema de gestión del flujo de trabajo con presa viva. Para ello, identificaron el tipo y tamaño de presa preferido por las larvas de la merluza al eclosionar, establecieron la densidad óptima de las presas que maximiza la alimentación de las larvas, determinaron la influencia de la intensidad de la luz en la actividad de alimentación de las larvas tempranas, evaluaron las diferencias de crecimiento entre lotes de larvas alimentadas con zooplancton como suplemento nutricional y, por último, testaron la eficiencia de crecimiento de un protocolo de alimentación progresivo, diseñado para larvas de hasta 30 días tras la eclosión (dph).

Los investigadores observaron que las larvas comenzaban a comer a los 6 dph, seleccionando la presa en función de su tamaño, pigmentación y comportamiento, y que su actividad era máxima en oscuridad o intensidad de luz media (600 lx). Así mismo, comprobaron que la optimización de la crianza con respecto al cultivo clásico, que utiliza presas comerciales, tiene efecto sobre el crecimiento temprano y la supervivencia hasta los 30 dph. Además, observaron que las dietas basadas exclusivamente en rotífero implicaban un bajo crecimiento larvario y la inviabilidad del cultivo de la merluza después de 15 dph, mientras que la inclusión de zooplancton silvestre en dietas tempranas duplicaba el crecimiento de larvas de 30 dph con respecto a las dietas basadas en artemia. Así, la dieta adaptativa para larvas de hasta 30 días diseñada según tamaño de presa viva (MiACop), que emplea la combinación de copépodos, rotíferos y nauplios comerciales de artemia, daba lugar a un crecimiento cinco veces superior al de la dieta de artemia o zooplancton. A la vista de estos resultados, los investigadores sospechan que el canibalismo masivo observado en esta especie a partir de los 25 dph esté relacionado con la ausencia de un tamaño de presa adecuado para combinar con la alimentación semi-seca del destete.
El diseño actual del flujo de trabajo para la alimentación temprana de la merluza europea ha demostrado ser un paso útil para asegurar una mayor proporción de juveniles que entran en la fase de destete.

El trabajo realizado constituye un ejemplo de cooperación entre investigadores marinos de dos centros de investigación gallegos pues, a pesar de contar con una financiación modesta, resulta exitoso debido al establecimiento de sinergias científicas. Este estudio contó con el apoyo económico del Ministerio de Economía y Competitividad a través del proyecto LETSHAKE (AGL2013 - 48468-R), cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), y con el apoyo económico del Programa de Consolidación de las Unidades de Investigación Competitiva cofinanciado por FEDER (Programa Operativo Galicia 2007-2013, Consellería de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria de Xunta de Galicia, RN # AOE_2008-080) a través de las acciones de cooperación HAKEUP y HAKEU+.

Foto: Estación de Ciencias Mariñas de Toralla (ECIMAT)