La industria de la acuicultura, en tierra, pero sobre todo en mar, con granjas al uso, se consolida en la provincia de Alicante hasta tal punto que la empresas de la Costa Blanca, con sede social en Santa Pola, El Campello, Crevillent, Guardamar, La Vila, Altea, Calpe y Alicante, ya lideran la producción de algunas especies. La dorada es la estrella, pues su cultivo se ha disparado en el último ejercicio contabilizado la nada desdeñable cifra de n 40% y alcanza máximos históricos con la mitad de la cría y engorde de toda España. Casi 10.000 toneladas de productos que generan un volumen de negocio bruto de 35 millones de euros.
Los datos de la patronal nacional del sector Apromar, que ha divulgado su último informe relativo al año 2012, y los del Comité Económico y Social (CES) de la Comunitat Valenciana revelan la penetración de esta industria, que permite ofrecer un producto en fresco a precios competitivos y preservar y conservar los recursos pesqueros mediante la recuperación de muchos caladeros.
La Comunitat Valenciana, con el 80% de empresas e instalaciones y por tanto de la producción concentrado en la Costa Blanca, produjo el pasado año 9.710 toneladas de dorada, lo que supuso un repunte del 40% respecto al año 2011. Con ese volumen de producción acuícola, las empresas alicantinas del sector vuelven a niveles previos a la recesión, en el año 2008. Murcia es la segunda región más productora, con 3.880 toneladas el último año, el 20,0% del total nacional, seguida por Canarias (2.740 t, el 14,1%), Cataluña (1.570 t, 8,1%) y Andalucía (1.530 t, el 7,9%).
Solo el 65% de demanda
Con ser bueno el dato, más lo es el hecho de que la patronal española Apromar señale sus grandes posibilidades de crecimiento. En España, el consumo aumentó el 19% el pasado año y el precio de venta al público no solo se devalúa, sino que se disparó el 16%. La producción acuícola en España (casi la mitad en la provincia de Alicante) cubre solo el 62% de la demanda interna, lo que supone una grandes expectativas de crecimiento.
La lubina es la segunda especie estrella de las granjas marinas de España y de la Costa Blanca. En toda la Comunitat se han producido 2.500 toneladas, algo menos de las del año 2011 que fueron 2.788. Pero representa la importante cuota del 17% de todo el mercado español acuícola. Se mantiene la misma producción de los últimos cinco años, aunque la cuota se reduce ligeramente al extenderse su reducción en Andalucía, preferentemente, pues ha duplicado su producción en este lustro. En la Costa Blanca no hay producción de rodaballo, ni besugo, ni lenguado, ni langostino y la de mejillón (clótxina) mediante batea también es poco menos que testimonial. Este año la Comunitat cuenta con 22 bateas mejilloneras, apenas 100.000 euros de negocio y 38 toneladas de producción. Ya se introducen las ostras europeas y la rizada. La última instalación es una empresa radicada en el puerto de Alicante, junto a la polémica e inutilizada lonja pesquera.
Las empresas alicantinas autorizadas son Acuisan (Santa Pola), Pesquerías Fincas el Espigar (Crevillent), Cudomar (El Campello), Granja Marina del Mediterráneo-Gramamed (en La Vila), Granja Marina Bahía Santa Pola-Gramabasa (Guardamar), Basademar (Altea), Alevines de Guardamar, Martorres, Culmar, Balmar (Altea) y Niordseas (Calpe), Promociones Marsan (Santa Pola) y Mediterráneo Servicios Marinos (Alicante. El CES resalta que «la acuicultura va adquiriendo importancia años tras año».