Avanzan los estudios en huella de carbono del mejillón y las microalgas en el marco del proyecto “Acuicultura y cambio climático” de la Fundación OESA

Martes, 11 Junio, 2013

El proyecto "Acuicultura y cambio climático" pretende avanzar en el análisis de ciclo de vida y los cálculos de huella de carbono de tres especies cultivadas en España, como son el mejillón, el rodaballo y las microalgas, utilizadas como alimento en las primeras fases larvarias.

Esta iniciativa, que desarrolla desde enero la Fundación OESA en colaboración con la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, la Universidad de Santiago de Compostela y la empresa Algaenergy, trata de profundizar cómo la acuicultura puede contribuir a mitigar los efectos del cambio climático a través del cultivo de especies fijadoras de dióxido de carbono (CO2) , como las microalgas y los moluscos (mejillón, ostras y almejas). El proyecto pretende encontrar nuevos sumideros de carbono en la producción acuícola española, donde más del 80% corresponde a los moluscos.

Entre los objetivos del proyecto, se encuentra el de dotar al sector acuícola español de nuevas herramientas adecuadas para el cálculo de la huella de carbono según la especie cultivada.

Durante el primer semestre del año, se ha avanzado en la elaboración de un primer informe acerca de las interacciones del cambio climático y la acuicultura. En este estudio se identifican posibles afecciones derivadas del aumento de CO2 que absorben los océanos a causa del incremento en la emisión de CO2 antropogénico a la atmósfera. Entre estas posibles alteraciones, destaca el mayor aumento de los episodios de floraciones de algas nocivas, cambios en las variables oceanográficas, fluctuaciones en la disponibilidad de especies usadas para la producción de harinas y aceites de pescado y regresión de la costa debido a la subida del nivel del mar.

Como resultado de este proyecto, también se prevé la elaboración de unas guías metodológicas para el sector con el fin de proporcionarles la información necesaria para calcular su propia huella de carbono y así ofrecer un valor añadido a sus productos de cara al consumidor final.

Esta iniciativa cuenta con la colaboración de la Fundación Biodiversidad a través de la convocatoria de ayudas 2012 para la realización de actividades en el ámbito de la Biodiversidad, el Cambio Climático y el Desarrollo Sostenible.