El nuevo rey de la granja marina

Miércoles, 24 Enero, 2007

En 2005 se sacaron de las granjas de nuestras costas 5.310 toneladas, lo que supone más del 75% de la producción mundial en cautividad. De éstas, 4.700 salieron de Galicia.

Cuando es joven se alimenta de moluscos y crustáceos. El menú de los adultos es más consistente: peces y cefalópodos. Lo necesitan para crecer hasta alcanzar máximos de un metro de longitud y quince kilos de peso. A los confinados en piscifactorías -en tanques que toman el agua directamente del mar- sólo se les permite desarrollarse hasta los dos kilos de peso. Son criados a base de harinas de pescado, por lo que su sabor no puede competir con el del rodaballo en mar abierto.

En este negocio España va a ver tambalearse su posición de liderazgo a raíz de la cancelación de tres plantas de Pescanova previstas en Galicia. Una de ellas, la que se ha decidido ubicar en el distrito portugués de Coimbra, requerirá una inversión de 140 millones de euros para producir más de 7.000 toneladas al año. Las otras dos iban a ubicarse en la costa de Lugo -con una inversión de 100 millones de euros y una producción conjunta estimada en 3.000 toneladas- pero, finalmente, no se construirán.

Los desacuerdos de la empresa con el Gobierno gallego, al que acusa de no disponer de un plan integral acuícola y dificultar la disponibilidad de suelo, dan un nuevo argumento a la lucha política entre el gobierno regional.

Si la Xunta de Galicia no muestra más diligencia en conservar piscifactorías, sí parece interesada en la repoblación del rodaballo salvaje, al que el hábitat de las rías gallegas debería resultarle satisfactorio. El Instituto Gallego de Formación en Acuicultura (Igafa), un centro puntero ubicado en Vilanova de Arousa (Pontevedra), ha soltado desde 2004 unos 15.000 alevines en diversos puntos de la costa. Los peces son controlados mediante una etiqueta identificativa y se espera conocer en 2008 su nivel de adaptación al medio. Vistos los precios en lonja, puede ser una buena noticia para los pescadores gallegos.