Mar habilita 1,5 millones de euros para ayudar a los bateeiros más castigados por las biotoxinas

Martes, 25 Febrero, 2014

El sector mitilicultor gallego va a tener las ayudas que esperaba tras sufrir el que muchos consideran uno de los peores años de su historia. Para compensarlo, la Consellería do Medio Rural e do Mar aplica la normativa vigente y habilita una partida de 1,5 millones de euros, que incluso puede aumentar si la demanda de los bateeiros es mayor.

Cada productor o empresario mejillonero va a poder acceder a subvenciones hasta alcanzar un máximo del 60% de las pérdidas sufridas, pero eso sí, no se trata de abrir el grifo sin control y repartir dinero entre las 3.337 bateas gallegas, sino que habrá que demostrar las pérdidas escrupulosamente, y para ello tendrán que haberse producido.

Tanto es así que solo cobrarán la ayuda aquellos que acrediten haber tenido cerrada su batea a causa de la presencia de biotoxinas durante más de cuatro meses consecutivos, y esto no va a ser fácil para muchos, ya que hay que recordar que el episodio tóxico más fuerte de los vividos el año pasado se produjo en octubre, y por tanto, aunque cerró casi todas las bateas, realmente estuvieron inoperativas durante los tres últimos meses del ejercicio. Y en ese supuesto no hay derecho a indemnización alguna.

La otra fórmula establecida para acceder al dinero público, y esta opción parece más viable para la mayoría, es demostrar que las pérdidas sufridas el año pasado superaron el 35% del volumen anual de negocio de cada empresa. Y el cálculo debe efectuarse en base a los ingresos declarados de cada batea en los tres años anteriores, es decir, 2010, 2011 y 2012.

Lógicamente el que declara entonces menos ingresos de los reales tendrá derecho a una ayuda inferior, y el que no enviara las estadísticas oficiales de venta a las diferentes agrupaciones no tendrá derecho a nada.

Esto supone que va a repartirse dinero para tratar de superar la difícil situación, pero se trata de buscar que las ayudas lleguen realmente a los bateeiros más perjudicados.

Así se hizo constar en una reunión mantenida ayer en Santiago en la que participaron los representantes de las principales organizaciones productoras, integrados en la Comisión do Mexillón, y los pesos pesados de la Consellería do Mar, como son su titular, Rosa Quintana, el secretario xeral, Juan Carlos Maneiro Cadillo, y Covadonga Salgado, directora del Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar).

Unos y otros hablaron de los perjuicios causados por la prolongada presencia de células tóxicas en las rías gallegas durante el pasado ejercicio, pero también reflexionaron sobre la relación directa entre los cierres de bateas y la aplicación del nuevo método químico de análisis impuesto por la UE, con el que parecen producirse muchas más situaciones de alerta que antiguamente, cuando únicamente se empleaba el bioensayo en ratón.