La Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias remitió al Ministerio del Medio Ambiente y Medio Rural y Marino una solicitud para la elaboración de un informe técnico que valore la posible colocación de nuevas jaulas para cultivos marinos, mediante concesión pública, en la costa de Tazacorte y Tijarafe, que serían destinadas a la puesta en marcha de una escuela taller de empleo relacionada con la acuicultura, la segunda de este tipo que se realizaría en la Isla.
La propuesta parte de una petición que reiteradamente ha realizado el Ayuntamiento de Tazacorte, que preside Ángel Pablo Rodríguez, desde hace más de cinco años. La primera referencia informativa sobre esta iniciativa se remonta al año 2003, según consta entre los acuerdos suscritos en el pleno municipal de esta localidad.
La colocación de las estructuras para el cultivo de peces necesita de una concesión pública. Se trata de dos nuevas jaulas de 16 metros de diámetro cada una y cuya producción total sería de 30 toneladas métricas (TM), en principio, sólo de lubinas y doradas.
En 2005, la Viceconsejería de Pesca autorizó inicialmente al Consistorio bagañete para que se instalaran las estructuras flotantes y la ocupación de la superficie marina que se vería afectada por su instalación, entendiéndose en la Cotmac que no era necesaria la evaluación de su impacto ecológico. Sin embargo, tras los últimos acontecimientos registrados en la zona, con escapes de peces de cultivo, con gran capacidad depredadora y que podrían estar alterando el ecosistema marino propio del litoral palmero, con denuncias incluso de los pescadores, se ha requerido de nuevos informes que avalen la posible instalación de nuevas jaulas.
Por su parte, desde el ayuntamiento se ha reiterado en varias ocasiones una petición al Servicio Canario de Empleo para poder poner en marcha la escuela taller. El proyecto necesario para ejecutar la actividad se redactó hace años y planteaba incluso la posibilidad de engordar, si están disponibles, unos 30.000 bocinegros, una especie canaria que podría ser suministrada por el Instituto Oceanográfico.
La insistente solicitud municipal ha llevado a sumar hasta tres solicitudes remitidas al SCE, que no habían sido contestadas. Sin embargo, el ayuntamiento mantiene la expectativa de poder realizar el proyecto.