Los productos de la acuicultura son saludables, sostenibles y accesibles, teniendo muchos de los atributos más valorados por los consumidores

Medir el bienestar animal es medir cuanto le cuesta al pez enfrentarse a las condiciones de cultivo.

La acuicultura está estancada. Hay que arriesgar en la investigación de nuevas especies, recursos y técnicas

No hay que tener miedo al cálculo de la huella de carbono porque en el sector acuícola el resultado es mínimo

Es indudable la sostenibilidad de la acuicultura en esteros y salinas

Tenemos que potenciar la investigación para que el cultivo de peces carnívoros sea lo más respetuoso posible con el medio ambiente

Se pueden diseñar peces a la carta con la cantidad de omega 3 que se requiera

Hace 25 años pronosticaron que la Artemia se habría acabado pero hoy en día seguimos dependiendo de ella para alimentar a las larvas

El impacto ambiental de la acuicultura en Egipto se puede evitar si se adoptan las medidas necesarias

El futuro de la acuicultura es prometedor pero sólo si se entiende como una actividad responsable con el medio ambiente

El sector pesquero y acuícola deben minimizar las fricciones y maximizar los beneficios mutuos

El nuevo papel de la acuicultura en el siglo XXI debe reunir a productores, científicos e instituciones para diseñar las necesidades del 2050

Es necesario concienciar del potencial nutritivo de las microalgas en la alimentación y la acuicultura

Una dieta equilibrada en los organismos cultivados es muy importante porque está íntimamente relacionada con la respuesta inmune

Se están diseñando nuevos sistemas de acuicultura, en circuitos cerrados que permitirán trabajar con un porcentaje de renovación de agua muy bajo